¿Puede una marca tener banda sonora?
Miremos primero la definición de Banda Sonora para responder a esta pregunta:
El término banda sonora hace referencia a la parte sonora de una proyección audiovisual, ya esté compuesta por diálogos, sonidos ambientales, música y cualquier otro tipo de sonido, sea real o sintético.
«Banda Sonora» en Wikipedia
Vamos ahora a compararla con la definición de «Audiobranding»
Uso estratégico del sonido y la música para ampliar el valor de las marcas, reflejando sus valores, personalidad y atendiendo al perfil actitudinal de su target y a los diferentes puntos de contacto.
Definición de Audiobranding «feita na casa»
Si equiparamos ambas definiciones podemos llegar a la conclusión de que el Audiobranding (Sonic Branding, Music Branding, etc) funciona como Banda Sonora para las marcas, buscando potenciar su comunicación auditiva por medio del refuerzo emocional y sensitivo del sonido y la música.
En un anterior artículo ya hablamos del audio logo, como la mínima expresión de la identidad sonora de una marca. Hoy extendemos ese audio logo a lo que se conoce como tema de marca (también conocido a veces como himno de marca, y a veces mal llamada canción de marca)
El Tema de Marca: su banda sonora
El tema de marca es una pieza sonora y musical que integra los elementos definidos en la identidad sonora y que funciona como pieza principal de la comunicación auditiva de la marca.
Mantiene una estrecha relación con el audio logo puesto que suele ser una extensión de este, integrándolo en un contexto donde funciona como motivo principal de la pieza.
Para que sea más sencillo de entender, nos es fácil pensar en la melodía principal de una canción, como puede ser el inconfundible riff de Smoke in the Water de Deep Purple. Sin embargo, el riff es tan solo una pequeña parte de la canción completa, pero funciona como enlace estructural para desarrollarla.
Esta melodía sería equiparable a lo que es el audio logo dentro de un tema de marca: el motivo principal entorno al que se desarrolla el resto de la pieza.
Esta pieza no tiene una duración concreta y dispondrá de distintas secciones y dinámicas de la misma manera que sucede con una canción.
Esto nos da lugar a una pieza sonora que podremos integrar en la comunicación de la marca (publicidad, locales físicos, rrss…) y que evoque los valores y personalidad de la marca definidos estratégicamente, generando un entorno emocional concreto para la comunicación de nuestra marca, además de garantiza la coherencia en ella.
Reducciones y Adaptaciones: Extendiendo nuestra identidad sonora
Muchos en este punto podrían preguntarse: «¿no es un único tema de marca muy poco? ¿No se aburrirán de escuchar siempre lo mismo?».
La respuesta más sencilla es decir no. Especialmente porque hay una clave en cuanto a la identidad sonora: la exposición.
Estos miedos nos nacen al trabajar cualquier expresión de la identidad de marca: ¿no serán muy pocos tres colores? ¿no será muy poco tener solo dos tipografías?
Es aquí donde definimos las aplicaciones de nuestra identidad: cómo podemos utilizarlas de una manera que no resulte repetitiva y construyendo un universo (visual, verbal, sonoro…) más allá del logotipo.
¿Qué es una reducción del tema de marca?
En el audiobranding existen varias formas de hacerlo, pero una de las más frecuentes son las reducciones.
Si el tema de marca presenta diferentes instrumentos y secciones, podemos agrupar algunos de estos instrumentos en cada una de las secciones para conseguir diferentes piezas, cada una con sus matices. Piensa en el siguiente ejemplo:
- Un grupo de instrumentos electrónicos (sintetizadores, batería electrónica…) para suscitar mayor sensación de tecnología, innovación o dinamismo.
- Un grupo de instrumentos de cuerda (violines, cellos…) para evocar cercanía, humanidad o saber hacer.
Estos dos grupos de instrumentos pueden congeniar en el mismo tema de marca evocando distintos atributos de la personalidad de la marca, y al mismo tiempo los podemos emplear por separado en contextos en los que queramos remarcar un atributo concreto.
¿Qué es una adaptación del tema de marca?
Las adaptaciones a veces también son conocidas como versiones secundarias o piezas derivadas, y efectivamente son piezas compuestas aparte del tema de marca que guardan relación con este (por medio de motivos comunes, instrumentos comunes, recursos líricos…) y suelen cumplir un propósito adicional que enriquezca el universo sonoro de la marca.
Por ejemplo, una marca puede tener tres adaptaciones del tema de marca en el que enfatice un atributo de su personalidad introduciendo nuevos instrumentos, dinámicas, etcétera.
- En algunos ejemplos de identidad sonora dan lugar a un tema de marca principal y varias adaptaciones, por ejemplo: chill (relajada), daring (atrevida), welcoming (acogedora)
Esto también va a ir sujeto a los touchpoints de la marca (por ejemplo, una versión relajada puede ser útil para un hilo musical en un stand de un evento).
Cómo veis, el tema de marca da versatilidad a nuestra identidad sonora, contribuye creando un entorno que acompañe a nuestros mensajes y apariciones de marca.
Esta extensión del audio logo nos permite integrarlo de una manera orgánica, que vuelca y evoca la personalidad de la marca trabajada en un trabajo de audiobranding.
Además, una de las grandes ventajas de un tema de marca es que nos olvidamos de preocuparnos buscando temas en bancos de música, y pelearnos con licencias de la música comercial.
No dudes, si quieres una marca que se sienta, descubre la banda sonora en tu marca.
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